Escudo de la Hermandad Infantil y Juvenil de Nuestra Señora de los Perdones y Jesús de la Esperanza. |
Manto de la antigua imagen |
Antigua imagen de Ntra. Sra. de los Perdones |
Respecto a su primer titular cristífero, era una imagen de Cristo, también de pequeña estatura (probablemente de escayola o pasta de madera), que realizaba su estación de penitencia junto a la Virgen.
La corta andadura de esta Cofradía no se halla exenta de
avatares. Apenas el ilusionante proyecto se había materializado, y la Hermandad
ponía su joven pasión cada Martes Santo en las calles de Vera, la tragedia se
cebó con su corta trayectoria: en la madrugada del Miércoles Santo de 1998, un
barrendero veratense alertaba de que algo no íba bien en la Iglesia de la
Encarnación. Aquella noche, un incendio se había declarado en nuestra
Parroquia, cobrándose no sólo daños materiales en una parte del edificio sino
que, por caprichos del destino, devastó por completo la imagen de la Virgen.
Respecto al origen del fuego, aún a día de hoy continúa
siendo un enigma aunque se baraja la hipótesis de una chispa producida por la
batería que iluminaba una parte de la candelería. Poco se conoce acerca del
suceso, sólo que aquella nefasta madrugada, el fuego consumió siglos de
historia y unos ilusionantes 8 años de esfuerzo y devoción. Así es, en un
instante, la juventud cofrade de Vera se había quedado huérfana de madre de la
forma más abrupta de entre las posibles.
Parece que no fue suficiente aquella desventura cuando, la
más desafortunada e inoportuna casualidad volvió a sacudir a la Hermandad: poco
tiempo después, durante una restauración en el retablo de la Iglesia el Cristo
de la Esperanza sufrió una caída accidental, sufriendo tales daños que la
imagen quedó irrecuperable.
Este relicario, situado a los pies de la actual Virgen contiene los restos carbonizados de la primitiva imagen. |
Aro de hebrea y corona de la antigua Virgen. |
En un brevísimo lapso de tiempo parecía que la más tenaz adversidad se había ceñido sobre la Cofradía. Afortunadamente, la fe, la devoción y la ilusión de aquellos jóvenes no tardaron en originar la oportuna reacción a aquellos acontecimientos.
Así, en 1999, Salvador Madroñal pone su trabajo al servicio
de la Hermandad, tallando una nueva dolorosa que fue bendecida el 21 de marzo
de ese mismo año en un multitudinario acto en que toda la Ciudad de Vera se
volcó con la corporación, y apadrinada por D. Félix Mariano López (Alcalde de
Vera) y Dña. Josefa Montoya.
Salvador Madroñal, el día de la bendición de la actual imagen. |
D. Manuel Mechón, cura párroco en aquellos años, bendiciendo la nueva talla. |
El mismo año, la Hermandad de la Virgen de las Angustias dona una pequeña talla de un Cristo, salido de los talleres del ilustre imaginero sevillano D. Juan Manuel Miñarro López.
Cristo de la Esperanza, obra de Juan Manuel Miñarro. |
La imagen de la Soledad, portada por los más jóvenes de la Hermandad, data del S. XVIII y fue donada por una familia veratense, con el fin de que fuera expuesta al culto y procesionara.
Y así, hasta nuestros días, la Hermandad de la Virgen de los
Perdones cuenta con más de 600 hermanos, todos ellos menores de 21 años.
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