Historia de la Santísima Virgen de las Angustias

La Virgen de las Angustias es una imagen de autor desconocido de finales de S. XVII en madera de boj policromada, tal y como nos cuenta el acta fundacional de la Hermandad:

`` Es condición que esta hermandad sea obligada a hacer luego que pueda una imagen de Nuestra Señora de las Angustias, con sus andas llanas de madera negra, una banderola de tafetán doble negro con una estampa en medio de Nuestra Señora de las Angustias…´´

Se trata de una imagen de candelero de madera y telas encoladas, que emulan los pliegues de una túnica. Son sus particulares rasgos los que hacen de esta imagen algo poco común, pues se aleja de los estereotipos barrocos de virgen joven, mostrando un desgarrador gesto de dolor y angustia sin igual.

Tal fue la devoción hacia la imagen que el día 10 de junio de 1888, conmemorando el IV centenario de la conquista de Vera, fue coronada patrona de la misma.

La Virgen, en 1925.
El día 11 de julio de 1926 fue Coronada por la diócesis, convirtiéndose así en la primera imagen mariana de la provincia de Almería en recibir la coronación canónica.

Foto actual de la imagen.
No obstante, la bella imagen de la Virgen de las Angustias tampoco se libró de los desmanes de la Guerra Civil, recibiendo el impacto de varias balas que deformaron su rostro, así como varios golpes en las manos con un objeto contundente. Afortunadamente, fue salvada por una familia que la ocultó en su casa y al fin de la Contienda, fue enviada a Valencia para su restauración.


En 2006 se llevó a cabo sobre ella una restauración consistente en la consolidación y limpieza de su policromía.

Inicialmente, al igual que sucedía con el resto de imágenes de Vera, procesionó a ruedas, adaptándose su paso inicial para ser portado a Varal  a mediados de los 90. Desde 2012 procesiona en un paso a costal, elaborado por el taller de orfebrería andaluza, en Sevilla.
Actual palio de Ntra.
Sra. de las Angustias.
La festividad de la Patrona de Vera se celebra cada 10 de junio, fecha que conmemora la toma de l Ciudad de Vera por los Reyes Católicos. Durante la misma, como vemos en la imagen de la izquierda, la fachada de su Ermita se engalana de flores donadas por todos los vecinos de Vera, presentando por esas fechas un aspecto sin igual.



La fachada de la Ermita, cubriéndose de flores
por su festividad.



























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