La imagen de la Virgen de las Huertas llegó a nuestra Ciudad
en fecha desconocida. La talla, de autoría anónima y aspecto infantil, es una
imagen de gloria que representa a la Virgen con su hijo en brazos. Según la leyenda popular, la devoción a la Virgen de las Huertas tiene su origen en Vera en una imagen de la patrona de Lorca que trajeron las tropas de esta ciudad al asistir a Vera durante el asedio morisco de 1569.
Con sede en la ermita que lleva su nombre, históricamente ha
sido custodiada y cuidada por los propietarios (antiguamente agricultores) de
los cortijos y fincas colindantes a aquélla.
La existencia en Vera de esta advocación, (como referimos más arriba, es además
patrona de Lorca), no es sino una manifestación del hermanamiento y vinculación existentes
entre ambas ciudades desde épocas cercanas a la Reconquista.
En cuanto a la romería, ya en 1860 se constata la existencia
de las fiestas en torno a la Virgen y, tras un largo declive propiciado por la
situación económica, en los años 80 se recupera, hasta llegar a nuestros días.
La romería de la Virgen de las Huertas se realiza cada
primer domingo de septiembre, sacando en carroza a la Virgen desde su Santuario
hasta el centro de Vera para, una vez recorrido, volver a la Ermita. Se trata
de una tradición que se ha convertido en un elemento característico y propio de
la idiosincrasia religiosa veratense. No son pocos los vecinos que participan
en ella aportando sus carrozas decoradas por ellos mismos, dando un toque de
colorido, alegría y folclore a la celebración.
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